¿Qué es la Cadena de Valor?
Es un hecho que el nuevo paradigma, los negocios electrónicos, avanza rápidamente impulsado por el enorme potencial de las nuevas aplicaciones basadas en Web. Desde un enfoque inicial, web site de “vendedor”, que ofrece sus productos y servicios hacia un colectivo de potenciales clientes, pasando por un mas reciente enfoque de “comprador” que selecciona a sus suministradores a través de la red, se llega al planteamiento de “comunidades virtuales” o espacios digitales de intercambios comerciales, en los que agentes de intereses comunes comparten procesos e intercambian información en línea, así como productos y servicios, con importantes ahorros en costos.
Aunque la gestión de la cadena de suministro no es un proceso necesariamente ligado a Internet, gracias a esta tecnología la empresa ha descubierto la posibilidad de ampliar sus sistemas de gestión más allá de sus propios límites, integrando en sus procesos de negocio a todos aquellos agentes que, directa o indirectamente, están implicados en la cadena de valor. La importancia radica en que se unen los distintos procesos de negocios y sistemas de información entre los clientes, compañías, proveedores y distintas organizaciones que formen parte de la cadena de valor. Dicha unión requiere de una comunicación total vía electrónica entre las empresas, que permita a un cliente diseñar y comprar un producto, así como comunicar requerimientos a los proveedores durante las etapas de producción y distribución.
Con estos avances, la cadena de valor se ha visto impactada, ya que ahora integrada mediante la tecnología de información se transforma el ciclo de la cadena de valor tradicional, donde los pedidos se realizan directamente a los proveedores, eliminando los intermediarios, lo que reduce costos y aumenta la productividad mediante una notable mejora en los gastos de los procesos de aprovisionamiento. Este nuevo planteamiento estratégico en la gestión de compras y todo lo relacionado con los procesos de compras y aprovisionamientos dentro de una organización ha permitido a las empresas conectarse a una comunidad de proveedores que comercializan sus productos y servicios.
Entre los beneficios tanto para compradores y vendedores, se encuentran:
q Simplificación de la cadena interna
q Simplificación de procesos
q Aumento de la productividad
q Mejor calidad de la información
q Mejor control
q Ampliación de la base de clientes potenciales
q Aumento de la eficiencia
q Aumento de la lealtad de clientes
q Mejora en la calidad de la información y de los procesos de inteligencia de mercado. Reducción del papeleo
q Menores costos por transacción
Uno de los principales factores claves en la integración de la cadena de valor es la tecnología, es importante aprovechar las ventajas que las Tecnologías de Información proporcionan para el mejoramiento de los procesos de la organización.
Medir el éxito de una estrategia o iniciativa no es tarea fácil, sobre todo si ésta es de gran magnitud, pero algunos factores que indican si una empresa ha logrado integrar exitosamente una cadena de valor son los siguientes:
q Transacciones en tiempo real
q Reducción de tiempo de proceso y transacciones
q Reducción de costos
q Operaciones precisas
q Mejor control interno de la información generada en la empresa
q Acceso a información de planeación de las distintas empresas que conforman la cadena de valor
q Resolución rápida de problemas
q Reducción de retrasos en entregas de pedidos
q Reducción de retrasos en entregas de insumos
q Rápida respuesta a peticiones del cliente
q Acceso al cliente para conocer estatus de sus pedidos
q Producción sincronizada con la demanda del mercado
::::: Conclusión :::::
Cuando la empresa mejore estos parámetros apoyada en tecnología adecuada, sin duda alguna los beneficios de la integración de la cadena de valor serán notorios y se podrá observar que los esfuerzos han dado buenos resultados.
Este cambio y sus beneficios no son discriminatorios, por el contrario son para empresas de todos los tamaños, que sepan diseñar las estrategias adecuadas para colaborar, conectarse y compartir información para mejorar la eficiencia de la cadena de valor de proveedores. Actualmente la importancia de participar en este tipo de iniciativas es evidente y poco a poco las organizaciones se están percatando de la relevancia de esto, ya que sino lo hacen quedarán relegadas del mercado. Así mismo, aquellas empresas tardías pueden recibir ayuda y ser impulsadas por sus propios clientes a adoptar estos cambios, aunque el panorama parezca difícil se deben diseñar las estrategias para aprovechar esto.